MIRA: Lento pero seguro

A Mira le interesa crecer seguro aunque esto les signifique mantener una velocidad más pausada. El proceso estipulado por el movimiento para otorgar el aval puede llevar hasta tres años. “Nosotros no otorgamos el aval a los candidatos que llegan tres o cinco meses antes de las elecciones.

Creemos que la entrada al partido debe ser producto de un proceso, de conocer bien a cada uno de los integrantes”, explica Manuel Virgüez, senador y vicepresidente del movimiento. “El partido ha sacrificado muchos votos”. Según el senador, han llegado políticos con un gran número de firmas tocando sus puertas para que les otorguen el aval pero les niegan la entrada porque no conocen nada sobre la persona.

A raíz de los escándalos por parapolítica, el movimiento implementó el ‘Curso Concurso’; sistema de formación de todos sus miembros y un mecanismo que les permite tener mayor control interno. Por medio de este curso, en el que han participado más de cinco mil ciudadanos, el partido otorga los avales y designa a sus candidatos según los méritos que demuestren cada uno de ellos.

Adicional a este sistema, el partido inicia una investigación sobre los antecedentes de los aspirantes con la ayuda de los organismos de control. Sin embargo, la indagación sobre los candidatos va más allá. “Además de los antecedentes disciplinarios, nosotros hacemos una investigación de campo en la que nos reunimos con sus familiares, visitamos el barrio y el ambiente en el que ellos viven”, comenta el senador.

El partido volverá a presentar, tal y como lo hizo en el 2006, listas cerradas. “La lista cerrada es el mecanismo que nos permite mantener un mayor control sobre los miembros del partido”, puntualiza Virgüez.